La salud mental es un tema que se suele invisibilizar, pero es de vital importancia para nuestro bienestar.
Los trastornos psicológicos afectan a ciertos grupos más que a otros, como aquellos con predisposiciones genéticas o experiencias traumáticas. En el caso de los adultos mayores existe un estimado del 15% de la población mayor sufriendo de algún trastorno de salud mental.
Vanessa Osorio, Terapeuta Ocupacional de las residencias para el adulto mayor Senior Suites, explica que las emociones y sentimientos que usualmente se asocian a la vejez, como la soledad o la tristeza, no son normales y pueden corresponder a problemas de salud mental. “Debemos entender que no hay una buena salud sin salud mental”, explica la especialista.
“Es importante estar atentos a las señales que un adulto mayor está sufriendo algún tipo de trastorno psicológico. Estos pueden ser no verbales como el abandono del cuidado personal, alteraciones del sueño, aislamiento social, cambios en la conducta, preparación de documentos, preocupación excesiva de la enfermad y la muerte, o también verbales como el repetir relatos de “no sirvo” o pensar que “soy una carga”.
Otros signos que pueden dar alerta de algún problema de salud mental en personas mayores son una escasa red de apoyo social, pérdidas, jubilación, maltrato, edadismo, síndrome de “abuela esclava” y sentimientos de inutilidad, desesperanza, soledad no deseada, visión negativa de la propia vejez.
Para las familias estas situaciones pueden ser de gran preocupación, pero si se puede ayudar y acompañar a las personas mayores que estén sufriendo de alguna afección mental:
Escuchar activamente sin juzgar: Es necesario entender a los adultos mayores y sus problemas y mostrar interés en lo que tengan que decir. La empatía es importante en estos procesos para que el adulto mayor se sienta acompañado y apoyado. Abordar el tema desde la preocupación y el cariño. Hacer preguntas abiertas.
Orientar a buscar apoyo profesional: En casos que sean necesarios, señalar la necesidad de buscar apoyo de un profesional de salud mental. Una vez que la persona mayor pidió ayuda, no hay que dejarla sola en el proceso. En estas situaciones, la familia sigue siendo fundamental para el proceso de acompañamiento. Es importante alertar a las redes de apoyo más cercana en estos casos.
Evitar descalificaciones: El adulto mayor está pasando por una situación de crisis psicológica, por lo que debemos evitar el descalificar los sentimientos de la persona, como también no hacer sentir a la persona que es una carga. Motivarlo
¿Dónde buscar ayuda?
Existen diversos canales de ayuda como ONG dedicadas especialmente a personas mayores que estén atravesando situaciones complejas en salud mental con foco en el acompañamiento, como Fundación Amanoz y Fundación Miranos. Así como también, oficinas municipales y sus departamentos de adulto mayor, y en el Servicio Nacional de Adultos Mayores Fono mayor: 800-4000-35.