
Con la llegada del invierno y el aumento de enfermedades respiratorias, vacunar a los escolares se vuelve una medida esencial para proteger su salud y bienestar. Los niños vacunados tienen hasta un 60% menos de riesgo de sufrir infecciones respiratorias graves, según el Instituto de Salud Pública (ISP).
Además, la inmunización reduce significativamente los contagios en las aulas, previene complicaciones médicas y ayuda a disminuir el ausentismo escolar. La vacunación se recomienda especialmente para menores con enfermedades crónicas o factores de riesgo.
En este contexto, el Ministerio de Salud promueve la vacunación contra la influenza, COVID-19 y otros virus estacionales como una herramienta clave para mantener entornos educativos seguros.
Tecnología y diagnóstico para una protección efectiva
Gracias a los avances en tecnología médica, hoy es posible contar con diagnósticos más rápidos y precisos. Exámenes de laboratorio y herramientas de imágenes permiten detectar enfermedades en sus primeras etapas.
“La vacunación y el diagnóstico precoz son fundamentales para un control más efectivo de las enfermedades respiratorias en niños”, destaca Hélida Silva, directora de Medical Affairs para Latinoamérica en Siemens Healthineers.
Chequeos complementarios para una salud integral
Junto con la vacunación, los especialistas recomiendan realizar chequeos médicos preventivos antes del invierno. Algunos exámenes importantes incluyen:
Hemograma completo, para detectar infecciones o anemia.
Pruebas de alergias, que ayudan a evitar síntomas que interfieran con el aprendizaje.
Control de crecimiento y peso, clave para monitorear el desarrollo y prevenir problemas como la obesidad.
La integración de la telemedicina y aplicaciones de salud también ha mejorado el acceso a la información y al seguimiento del calendario de vacunación, facilitando la toma de decisiones informadas por parte de las familias.