
Ante la falta de agua potable que afecta a millones en la región, Tork refuerza la gestión hídrica con innovación y sostenibilidad.
América Latina y el Caribe enfrentan una crisis creciente de escasez de agua: según la CEPAL, 2,5 de cada 10 habitantes —más de 160 millones de personas— carecen de acceso adecuado a agua potable. Banco Mundial advierte, además, que hasta el 40 % del agua destinada al consumo humano se pierde antes de llegar a los hogares, principalmente por fugas e infraestructura deficiente. A nivel global, la ONU alerta que la disponibilidad per cápita de agua ha disminuido un 22 % en las últimas dos décadas.
En este contexto, y en el marco de la Semana del Agua, organizada por el Instituto Internacional del Agua de Estocolmo bajo el lema “Agua para la acción climática”, distintas industrias de la región han resaltado sus esfuerzos por optimizar el uso del recurso. Una de las estrategias más relevantes es la recirculación del agua, que permite su reutilización en procesos productivos y reduce la presión sobre fuentes naturales.
Desde Tork®, marca líder en el mercado de higiene profesional y parte de Essity, destacan avances significativos en este ámbito. El 85 % del agua utilizada en sus plantas de América Latina es reutilizada, gracias a prácticas de recirculación aplicadas en toda la región.
“En Tork estamos comprometidos con la gestión responsable del agua, un recurso clave para nuestra industria. Nuestras operaciones buscan minimizar el impacto ambiental, aumentar la eficiencia y generar valor sostenible para las comunidades donde operamos”, afirmó Paulina Barragán, Brand Communications & Sustainability Manager para Latinoamérica en Tork®.
La compañía ha implementado iniciativas adicionales en distintos países: en Chile, el 50 % del agua empleada se reutiliza en riego agrícola, beneficiando a comunidades locales; en Colombia, el 94 % de los residuos generados son aprovechados; y en México, la planta de Uruapan recicla el 66 % de su consumo total a través de una moderna planta de tratamiento de aguas residuales.
Estas prácticas no solo ayudan al medio ambiente, sino que también fortalecen la reputación de las compañías. De acuerdo con un estudio de Nielsen, el 66 % de los consumidores están dispuestos a pagar más por productos y servicios de empresas comprometidas con la sostenibilidad y la gestión del agua.
“En la Semana del Agua hacemos un llamado a que más empresas de la región adopten tecnologías y procesos que optimicen el consumo hídrico. La instalación de sistemas de recirculación, el tratamiento de aguas residuales, la reducción de plásticos y la capacitación comunitaria son acciones concretas que marcan la diferencia”, sostuvo Francisco Salamé, Director Comercial para el Cono Sur en Tork®.
La urgencia es clara: la ONU proyecta que, para 2050, la demanda de agua en América Latina aumentará un 43 %, casi el doble del promedio global. Frente a este desafío, expertos destacan algunas claves para un uso más responsable del recurso:
Monitoreo y medición del consumo para detectar fugas y corregir ineficiencias.
Tecnologías eficientes, como grifos de bajo consumo y sensores inteligentes
Reciclaje y reutilización de agua tratada en riego, limpieza y procesos industriales.
Prevención de pérdidas mediante mantenimiento de infraestructura.
Educación y sensibilización con campañas que fortalezcan el compromiso colectivo.
La Semana del Agua recuerda que el futuro hídrico de América Latina dependerá de la acción conjunta de gobiernos, empresas y ciudadanos para transformar la manera en que gestionamos este recurso vital.







