Estudio revela que secadores de aire aumentan en 42 % las bacterias en las manos, mientras que las toallas de papel eliminan hasta el 77 %.
Elegir entre secadores de aire y toallas de papel al secarse las manos puede parecer una decisión trivial, pero tiene implicancias importantes en la higiene.
Un reciente estudio sobre secadores de aire y bacterias, realizado por Essity y analizado por Tork®, revela que estos dispositivos pueden incrementar hasta en un 42 % la presencia de bacterias en las manos, mientras que las toallas de papel eliminan hasta un 77 % de los gérmenes residuales tras el lavado.
Según los datos, un 63 % de quienes utilizan secadores de aire no se secan completamente, dejando las manos húmedas, lo que favorece la proliferación de bacterias.
A esto se suma que los secadores pueden contener hasta 48 veces más bacterias que un asiento de inodoro, lo que los convierte en un riesgo potencial de propagación de gérmenes en espacios públicos.
La “Encuesta Global de Higiene y Salud” de Essity confirma esta preocupación. El análisis de Tork®, marca líder en soluciones de higiene profesional, demuestra que el secado con toallas de papel no solo es más efectivo al eliminar la humedad, sino que también contribuye activamente a remover bacterias gracias a la acción de frotado.
De hecho, el 68 % de los encuestados prefiere el uso de toallas de papel frente a los secadores de aire, valorando no solo su efectividad, sino también su rapidez, menor contaminación acústica y menor exposición a gérmenes.
Además, estas toallas permiten múltiples usos, como limpiar el rostro, evitar el contacto directo con superficies contaminadas o contener estornudos, manteniendo los gérmenes en la papelera y fuera del entorno.
“Nuestro compromiso es ofrecer alternativas de higiene que sean efectivas y seguras. La encuesta realizada nos entrega datos clave para innovar continuamente, con productos que respondan a las necesidades reales de los usuarios y promuevan prácticas de higiene correctas en baños públicos”, afirma Francisco Salamé, director de negocios de Tork® en el Cono Sur.
Con estos resultados, queda claro que optar por toallas de papel no solo es una decisión más higiénica, sino también una medida preventiva eficaz para mejorar la salud pública en espacios compartidos.