Presidente Boric encabezó la apertura del Parque de la Alegría en Renca, un proyecto de seis hectáreas que recupera espacio público, fortalece la seguridad barrial y promueve la vida comunitaria en el entorno de la autopista Costanera Norte.
La Municipalidad de Renca dio un paso decisivo en la recuperación del espacio público con la inauguración del Parque de la Alegría, una obra de alto estándar urbano que beneficiará directamente a miles de vecinos. La actividad fue encabezada por el Presidente Gabriel Boric, quien destacó el valor de invertir en infraestructura con sentido comunitario y enfoque social.
El proyecto forma parte del Programa Buen Vecino, iniciativa que busca integrar de manera armónica las obras concesionadas a los barrios, transformando entornos degradados en espacios seguros, inclusivos y pensados para el encuentro ciudadano. En este caso, el parque se emplaza en un sector colindante a la autopista Costanera Norte, resignificando su entorno urbano.
Un parque para todas las edades
Con una superficie de seis hectáreas, el nuevo Parque de la Alegría reemplaza una infraestructura con casi dos décadas de antigüedad que presentaba bajo uso y deterioro. Tras 10 meses de intensas obras, el lugar se transformó en un espacio moderno, accesible y activo.
Entre sus principales instalaciones destacan:
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Infraestructura deportiva: skatepark, área de calistenia, cancha de patinaje y multicanchas completamente renovadas.
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Fútbol de alto estándar: cancha principal con pasto sintético e iluminación artificial.
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Espacios inclusivos: juegos para la primera infancia, áreas recreativas para personas mayores y baños inclusivos.
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Vida comunitaria y mascotas: centro cívico para reuniones vecinales, senderos peatonales y un área exclusiva para el cuidado de mascotas.
Seguridad con enfoque comunitario
Uno de los ejes centrales del proyecto fue la seguridad, abordada desde una perspectiva preventiva y de uso activo del espacio público. El parque cuenta con cámaras de seguridad de última tecnología, iluminación reforzada en senderos y multicanchas, y accesos controlados que permiten una experiencia segura para las familias.
El diseño del parque fue construido de manera participativa, con la colaboración de más de 90 organizaciones comunitarias de Renca, asegurando que las obras respondieran a las reales necesidades del territorio y fortalecieran el sentido de pertenencia.
Inversión y proyección urbana
La iniciativa representó una inversión superior a los $6.877 millones (valor noviembre), consolidándose como una de las intervenciones urbanas más relevantes de la comuna en los últimos años.
Con la inauguración del Parque de la Alegría, Renca avanza en un modelo de ciudad que integra infraestructura, participación ciudadana y bienestar, demostrando que las obras concesionadas pueden ir más allá de la conectividad y convertirse en verdaderos espacios de encuentro, recreación y cohesión social.
