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En abril comenzó la campaña mosca de la fruta en las comunas San Bernardo y Lo Espejo. Muchas personas se han preguntado, ¿por qué si Chile es libre de la plaga hay campañas de erradicación? Acá te lo contamos.
La campaña mosca de la fruta es el programa emblemático del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), la primera detección de esta plaga fue en el año 1963 en Oasis de Pica, región de Tarapacá.
Fue en el año 1980 que el Ministerio de Agricultura a través del Servicio Agrícola y Ganadero crea el proyecto 335, con el objetivo de mantener fuera del país a la mosca de la fruta y erradicar cualquier ingreso accidental que se presente y en el caso que ocurriera, ocupar una estrategia que permita el rápido control y erradicación de la plaga. Por lo tanto, en el caso de Chile, libre de la plaga de hace más de 30 años, es fundamental determinar el ingreso del insecto.
¿Cómo una mosca tan pequeña puede causar tanto daño?
Ceratitis capitata, es el nombre científico para la plaga conocida mundialmente como mosca de la fruta, una de la más dañina y temida en la agricultura. Este insecto ataca alrededor de 250 especies de frutales y hortalizas.
“Dependiendo de la temperatura y humedad del ambiente, las moscas pueden llegar a colocar entre 150 a 200 huevos en su fase adulta. Las hembras poseen un aparato ovipositor que les permite depositar sus huevos en la fruta”, explicó Guillermo Crothers, jefe de la Campaña mosca de la fruta San Bernardo 2024.
Una vez que se desarrollan los huevos, nacen las larvas, éstas penetran en la pulpa alimentándose de la fruta fresca, la que comienza a pudrirse hasta que cae. Al caer al suelo las larvas salen y se entierran, transformándose en pupas. Las pupas se desarrollan en la tierra, convirtiéndose en nuevas moscas adultas; machos y hembras que reinician el ciclo biológico.
“La mosca está presente en toda América a excepción de Chile, por lo mismo el SAG mantiene un programa de alta detección que le permite detectar tempranamente ingresos de la plaga, lo que asegura su pronta erradicación, antes de que el insecto se establezca en el lugar”, comentó el director regional del SAG RM, Claudio Ternicier.
El sistema de detección temprana es realizado por el Servicio Agrícola Ganadero durante todo el año, en lugares que son determinados “de riesgo” porque están más propensos a la plaga. Las unidades de control contemplan un sistema de trampas, con cebos atrayentes, (alrededor de 15 mil en todo el territorio nacional, menos en la región de Magallanes), que son revisadas periódicamente por si hay capturas de moscas. Además, está el muestreo de frutas para examinar en laboratorio si se encuentran larvas. Y el sistema preventivo TIE, que son insectos machos irradiados estériles liberados en las zonas de riesgo, con el objetivo de impedir la reproducción de la plaga.
Una vez que se encuentran capturas de la mosca de la fruta, comienza el proceso de vigilancia, donde se monitorean las trampas para ver si se encuentran otros ejemplares. Cuando se detectan más insectos en cualquiera de sus estados; huevo, larva, pupa y adulto, comienza el plan de acciones inmediatas que da inicio a la campaña de control y erradicación.
La mosca de la fruta es considerada en Chile como una plaga cuarentenaria ausente, lo que significa que es un peligro para la agricultura del país, pero no está presente o establecida en el territorio. Pueden existir detecciones, pero gracias al trabajo constante que realiza el SAG, son detectados en forma oportuna. Por lo tanto, no se pierde la condición de país “Libre de la plaga”. Esto nos permite, desarrollar un comercio internacional, como principal exportador de fruta y hortalizas frescas en el mundo.
Por eso es importante, si viajas al extranjero no traer productos de origen vegetal, ya que pueden venir contaminados con el insecto, no trasladar a otros lugares, fruta producida en los hogares y permitir el ingreso de funcionarios/as SAG a sus casas para que realicen labores de control y erradicación de la plaga, así se mantiene la sanidad de la agricultura y medio ambiente.
