El analista político Mario Herrera, explicó cuáles son los mitos electorales más extendidos en Chile, desde la interpretación de los votos nulos y blancos hasta la presencia de detenidos desaparecidos en los padrones.
En cada proceso electoral en Chile se repiten mitos, confusiones conceptuales y noticias falsas, especialmente a través de redes sociales. Así lo señaló el analista político de la Universidad de Talca, Mario Herrera Muñoz, quien destacó que uno de los errores más persistentes es la creencia de que los votos nulos y blancos se suman a la opción mayoritaria, algo que actualmente no ocurre.
El académico explicó que este mito tiene un origen histórico: el plebiscito de 1980, un proceso cuestionado por la ausencia de padrón electoral y por dudas sobre su transparencia. “En esa elección, efectivamente los votos nulos y blancos se sumaron a la mayoría, pero eso ocurrió solo en esa ocasión y no ha vuelto a aplicarse”, afirmó.
Herrera precisó que anular o votar en blanco no es un acto de desinterés, sino una forma legítima de expresar inconformidad. “Quien anula o deja el voto en blanco es una persona a la que sí le importa el proceso, pero que no se identifica con ninguna de las opciones disponibles”, indicó.
Otro mito recurrente, agregó, es la idea de que en el padrón electoral aparecen los nombres de detenidos desaparecidos como si estuvieran habilitados para sufragar. El experto aclaró que el SERVEL informó este año que esas personas figuran en los registros como un homenaje, bajo la denominación “Persona Ausente por Desaparición Forzada”, lo que no constituye participación electoral.
Finalmente, Herrera abordó un error semántico común: la confusión entre cámara secreta y urna. Según la ley electoral, la cámara secreta es el espacio donde se marca la preferencia en privado, mientras que la urna es el contenedor donde se depositan los votos. Aunque en el lenguaje cotidiano ambos términos se mezclen, la diferencia legal es clara.








