
La inteligencia artificial, la industria en Chile y la sostenibilidad son cuatro conceptos que hoy definen el camino de la transformación digital en el sector productivo nacional.
En el marco de la llamada industria 4.0, esta tecnología se ha posicionado como un motor de cambio que mejora procesos, reduce tiempos y optimiza recursos.
Según datos recientes, cerca del 90% de las industrias chilenas acceden a sus datos, pero solo la mitad cuenta con tecnología para utilizarlos de forma eficiente.
Esto representa una oportunidad clave para que la IA transforme esos datos en decisiones estratégicas.
En el contexto latinoamericano, la IA ya ha generado impactos positivos en energía, gas y exploración, con un aumento en la productividad del 10%, según cifras de la Universidad de Chile.
Seis beneficios clave de la IA en la industria chilena
Rérison Otoni, líder de Smart Manufacturing en Stefanini Group, destaca seis ventajas de la implementación de IA en la industria 4.0:
Optimización de la producción: Permite fabricar más con los mismos recursos, mejorando procesos de diseño, mantenimiento y personalización de productos.
Reducción de costos: Optimiza el consumo de agua, energía y otros insumos clave, lo que impacta directamente en el retorno de inversión.
Aumento de la calidad: En sectores como alimentos y bebidas, la IA garantiza procesos minuciosos, seguros y normados.
Seguridad y salud laboral: Mejora el entorno de trabajo, reduciendo riesgos y elevando el bienestar del personal, en línea con estándares ESG.
Mejor toma de decisiones: Gracias a su capacidad de procesar grandes volúmenes de datos, permite automatizar decisiones estratégicas y anticipar problemas.
Sostenibilidad: La IA ayuda a reducir residuos, controlar emisiones y promover un uso eficiente de los recursos, alineándose con los desafíos climáticos.
Oportunidad para la industria chilena
Según Otoni, el uso de IA acelera proyectos que antes tomaban cinco años en un 50% del tiempo, democratizando la tecnología para empresas de todos los tamaños.
“En los próximos cinco o diez años, la competitividad pasará por la digitalización».
«Chile tiene una gran oportunidad para impulsar su economía, siempre que cuente con tecnología y conocimiento para aprovechar todo el potencial de la IA”, concluyó el especialista.