Por más de 30 años, Fantasilandia y el Hogar de Cristo han unido fuerzas para regalar una jornada de alegría, inclusión y entretención a miles de niños, jóvenes y personas mayores, en una tradición solidaria que este 2025 rindió un especial homenaje a su fundador, Gerardo Arteaga Oehninger.
Fantasilandia volvió a abrir sus puertas para vivir una de sus jornadas más significativas del año: la tradicional celebración navideña junto a niños, jóvenes y personas mayores pertenecientes a jardines infantiles, salas cuna, programas de protección, residencias y servicios sociales del Hogar de Cristo. La actividad, cargada de emoción y sentido social, permitió que miles de participantes disfrutaran de una mañana completa de juegos, risas y entretención en el parque de atracciones más emblemático de Chile.
Esta iniciativa solidaria, que se realiza de manera ininterrumpida desde hace más de tres décadas, se ha consolidado como un hito de inclusión y compromiso social, donde la entretención se transforma en una herramienta de dignidad, encuentro y alegría para quienes viven realidades complejas.
Un homenaje cargado de significado
La edición 2025 tuvo un carácter especialmente emotivo, al ser la primera jornada realizada tras el fallecimiento de Gerardo Arteaga Oehninger, fundador de Fantasilandia y aliado histórico del Hogar de Cristo. Su visión, generosidad y compromiso con la infancia permitieron que esta actividad creciera y se transformara en una tradición profundamente esperada cada Navidad.
Durante la jornada se realizó una ceremonia de homenaje a su legado y al del Padre Josse van der Rest, cuya colaboración fue clave en el origen de esta iniciativa solidaria, que año a año regala una experiencia inolvidable a miles de personas.
“Para miles de niños y jóvenes, esta mañana fue un regalo enorme: risas, juegos, adrenalina y la posibilidad de sentirse privilegiados, aunque fuera por un día. Para nosotros, además, fue una forma de homenajear a Gerardo, quien siempre creyó en la infancia y en la importancia de llevar alegría donde más falta hace”, señaló José Francisco Yuraszeck, S.J., capellán general del Hogar de Cristo.
Un legado que sigue vivo
Desde la familia Arteaga, también destacaron el profundo significado de la actividad.
“Mi padre dedicó su vida a este parque y siempre tuvo la convicción de que la entretención debía estar al alcance de todos. Ver esta jornada realizada nuevamente, con tanta energía y cariño, es la mejor manera de honrar su legado”, afirmó Gerardo Arteaga Cerda, en representación de la familia.
“Esta actividad refleja su espíritu: abrir puertas, compartir alegría y crear recuerdos para quienes viven situaciones difíciles”, agregó.
Reconocimiento internacional y vocación social
Este año, además, Gerardo Arteaga Oehninger fue incorporado al Hall of Fame de IAAPA, la Asociación Internacional de Parques de Atracciones, reconocimiento que distingue a figuras que han marcado la historia de la industria de la entretención a nivel mundial. En este selecto grupo figuran referentes como Walt Disney y Dolly Parton, lo que da cuenta de la magnitud de su legado.
Desde Fantasilandia y el Hogar de Cristo destacaron que este reconocimiento internacional refleja los mismos valores que inspiran esta jornada solidaria: inclusión, servicio, afecto y compromiso con el país, principios que Gerardo Arteaga promovió durante toda su vida y que hoy siguen presentes en cada sonrisa compartida en el parque.
