Por Jacqueline Vera, gerente de Negocios de Entelgy Chile
Las fábricas de desarrollo de software impulsan el crecimiento económico al potenciar la innovación y la competitividad de las empresas.
Las fábricas de desarrollo de software (software factory), surgidas entre las décadas de los sesenta y setenta con la fundación de empresas como Hitachi Software Works, han sido siempre determinantes para el auge de economías locales.
Según la plataforma de datos empresariales Fortune Business Insight, el mercado global de software de desarrollo de aplicaciones se valoró en 111.210 millones de dólares en 2024,[1] proyectando un crecimiento de 138.410 millones de dólares en 2025 a 621.310 millones de dólares en 2032.
En Chile, el rubro tecnológico en la actualidad es igual de relevante; de acuerdo al International Data Corporation (IDC), principal proveedor mundial de inteligencia de mercado, el desarrollo de software local alcanzó el año anterior un crecimiento del 11% respecto a 2023.
Un escenario apalancado, en gran medida, debido a una alta tasa de cotización de soluciones basadas en inteligencia artificial, aprendizaje automático y análisis de datos para proporcionar insights, tomar decisiones acertadas y proteger información con sistemas de detección de intrusión, firewalls y otros
Todo esto y más, desarrollan las software factory, convertidas hoy en verdaderos centros estratégicos para la competitividad de una empresa de cualquier industria; pues, permiten escalar, estandarizar y profesionalizar la creación e implementación de software. De hecho, en cifras estimamos que esta competitividad se incrementaría en un rango del 15% al 35%, dependiendo sí del sector, el tamaño de la empresa y su madurez digital previa.
Ahora bien, la principal ventaja de una fábrica de software radica en la capacidad de ofrecer productos de alta calidad, en menor tiempo y con un proceso optimizado que reduce costos y riesgos. Los casos prácticos muestran que su implementación puede mejorar la eficiencia operativa entre un 20% y 40%, lo que se traduce en un mejor rendimiento, reducción de tiempos de entrega y mayor satisfacción del cliente.
En mayor detalle, ¿qué incluye el catálogo de la fábrica? Anote: Soluciones informáticas, como aplicaciones web y móviles para plataformas y dispositivos; sistemas de planificación de recursos empresariales para gestionar procesos comerciales complejos, como finanzas, RRHH, seguros, inventario y logística; sistemas CRM para administrar relaciones con clientes que contemplen funciones como gestión de ventas, marketing, servicio al cliente y data analytics; plataformas CMS para crear, administrar y publicar contenido en línea.
La inteligencia artificial además dispone de herramientas como chatbots o dashboards con indicadores clave que, mediante APIs o plataformas existentes, aportan aún más agilidad, escalabilidad y eficiencia en sectores críticos.
