La dermatóloga Carolina Gómez, académica de la Facultad de Medicina de la U. de Chile, explica cómo el consumo excesivo de azúcar acelera el envejecimiento cutáneo, favorece el acné y daña el colágeno.
¿Sabías que el exceso de azúcar puede afectar directamente la salud de tu piel? Según la doctora Carolina Gómez, profesora del Departamento de Dermatología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, una dieta alta en azúcares simples puede provocar acné, pérdida de elasticidad y envejecimiento prematuro.
“La glucosa en exceso promueve la formación de productos de glicación avanzada, que dañan el colágeno y la elastina, responsables de la firmeza y luminosidad de la piel”, explica la especialista. Esto se traduce en una piel más flácida, apagada y con arrugas.
La dermatóloga detalla que el azúcar impacta a través de tres mecanismos principales: la glicación, la inflamación y los cambios hormonales.
Glicación: las moléculas de azúcar se unen a proteínas estructurales como el colágeno, generando estrés oxidativo e inflamación que acelera el envejecimiento cutáneo.
Inflamación: un consumo excesivo de azúcar aumenta la respuesta inflamatoria del cuerpo, agravando afecciones como el acné y la rosácea.
Efecto hormonal: el azúcar puede alterar los niveles hormonales y estimular la producción de sebo, lo que incrementa la aparición de granos y espinillas.
De hecho, se ha comprobado que aumentar en solo un 5% la ingesta de azúcar puede elevar en 20% el riesgo de acné.
Consejos para proteger y rejuvenecer la piel
La doctora Gómez recomienda reducir el consumo de azúcar y limitar los azúcares añadidos a menos del 10% de las calorías diarias, idealmente bajo el 5%. “Evitar bebidas azucaradas, dulces y alimentos procesados ayuda a disminuir la glicación”, señala.
También sugiere optar por una dieta antioxidante, incorporando frutas, verduras, granos integrales, vitamina C, polifenoles y flavonoides, que ayudan a combatir el estrés oxidativo.
Otros hábitos saludables como hacer ejercicio, no fumar, evitar el alcohol en exceso y usar protector solar diariamente contribuyen a mantener una piel más firme y radiante.
En cuanto al cuidado tópico, la especialista recomienda cremas o sérums con vitamina C, retinoides o extractos vegetales como arándano, que fortalecen la firmeza y luminosidad cutánea. Además, estudios recientes muestran que el consumo diario de péptidos de colágeno durante 12 semanas puede reducir significativamente los productos de glicación avanzada.
Según la dermatóloga, el problema no está en el cacao, sino en los azúcares, grasas y lácteos añadidos. “El chocolate con leche o con alto índice glicémico eleva la insulina y los factores de crecimiento, estimulando las glándulas sebáceas y la inflamación del folículo”, advierte.
Un estudio con más de 70 mil personas reveló que quienes consumen más lácteos tienen un 16% más de riesgo de desarrollar acné.
En resumen, reducir el azúcar, cuidar la alimentación y adoptar hábitos saludables son claves no solo para tu bienestar general, sino también para mantener una piel joven, firme y luminosa.
