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En Librería Qué Leo, ubicada en Av. Pedro de Valdivia 40, se desarrolló una interactiva presentación que integró a un importante número de público, en torno a la obra del legendario trío sanmiguelino.
Por Beto Arán
Fotos Leonardo Ortiz
Si lleváramos a la pantalla grande la vida y obra del tridente González, Tapia y Narea, seguramente se trataría de esos guiones cinematográficos donde todo sirve, nada sobra y todo detalle aporta. Una cualidad reconocible en la obra del periodista nacional, convirtiendo su relato junto a la voz de sus propios protagonistas, en un material de lectura obligatoria para todo fanático de la banda. Sus líneas nos ofrecen una mirada de los primeros días de la agrupación, así como del escenario cultural, social y político de los años 80’.
Además de Alejandro Tapia, el panel contó con la presencia de bloguero y profesor, Raimundo Zubelzu (@Proferayado). De igual modo, incorporó la participación de Beto Arán, periodista, creador del portal los90.cl, quien moderó las diversas preguntas y alcances de un público que interactuó sistemáticamente con los anfitriones de la jornada.
El evento también ratificó el éxito de ventas, que hoy se encuentra a un paso de agotar su primera edición, ratificando los frutos del trabajo investigativo que se extendió por 4 años, recopilando testimonios de desconocidos protagonistas, quienes componen una parte fundamental en la historia de Los Prisioneros.
Según Alejandro Tapia, su intención fue “desarrollar una investigación, lo más exhaustiva posible vinculada a su primera etapa que abarca el período 1980-1986. Fue un trabajo periodístico de largo tiempo. Me preocupé de indagar en aspectos desconocidos de la banda, predominando el enfoque musical. Para lograr mi objetivo, me contacté con personas, que podríamos definir como“actores B”. En la práctica, individuos que nunca habían contado su relación con Los Prisioneros, me refiero a roadies, asistentes, colaboradores, familias, amigos, primeras pololas, por citar algunos ejemplos. Sentí que ellos tenían mucho que decir, a través de un relato centrado en la música”
La investigación señala que “en San Miguel, ya sea en el Liceo N.º6, el Miguel León Prado, el Claretiano, así como en otros colegios, existía la onda de grabarse discos y personas con bastantes vinilos. En dicho contexto, el disco que les generó mayor impacto fue “Sandinista!” (1980) de The Clash”, señaló el periodista.
Para Tapia “éste contenía variados géneros, al punto que la banda se quiso acercar a ese sonido. A pesar de que siempre estuvo presente, la falta de equipos para tales efectos, les impidió llevar a cabo ese viejo anhelo. No obstante, en “La voz de los 80’” escuchas twist, ska, new wave, synth pop y reggae. Es un disco maravilloso, porque tiene de todo y suena muy chileno”.
Desde lo musical, “ellos pretendían que sus discos no sonaran iguales. Sin ir más lejos, “Pateando Piedras, suena muy diferente a “La voz de los 80’”. Cualidad que también se cumple en “La cultura de la basura” y “Corazones”. Bajo esa perspectiva, Los Prisioneros no sólo tienen el mérito de ser auténticos, sino que también la capacidad de reinventarse en cada producción”, explicó el autor.
“Ya viene la fuerza: Los Prisioneros 1980-1986”, destaca la química entre sus tres músicos, como un factor determinante para la consolidación de la banda. Asimismo, rescata grandes anécdotas e historias que cautivaron a un público, que también pudo acceder en @queleo40 a la compra del libro, cd y vinilos de la banda, con importantes descuentos a raíz del evento.
Sin duda, una obra que contribuye al legado de un grupo que traspasó generaciones, con letras y melodías que ostentan un lugar de privilegio en el cancionero nacional.
