La artrosis puede ser causada por una combinación de factores, incluyendo el envejecimiento, lesiones articulares previas, sobrepeso u obesidad, predisposición genética y actividades laborales o deportivas que ejercen un estrés excesivo sobre las articulaciones.
Según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y del Instituto para la Métrica y la Evaluación de la Salud (IHME, por sus siglas en inglés), al año 2020 casi 600 millones de personas en todo el mundo padecían de artrosis y se estima que al 2050 afectará a más de mil millones de individuos.
Sumado al alza de la esperanza de vida en el mundo, Chile se destaca como el tercer país en América Latina con más casos de esta patología. La Encuesta Nacional de Salud 2016-2017 reveló que más del 50% de la población mayor de 50 años sufre de artrosis en alguna articulación relevante.
La artrosis es una enfermedad degenerativa de las articulaciones, que aunque se asocia comúnmente con el envejecimiento, puede afectar a personas de todas las edades.
Al respecto, la doctora de Clínica CRL, Daniela Cuadra, explica que la artrosis -también conocida como osteoartritis- es una enfermedad articular muy frecuente y se produce por desgaste del cartílago articular.
“Las articulaciones son las uniones entre los huesos, en su interior encontramos, generalmente líquido sinovial que es producido por la membrana sinovial, que sirve como lubricante, amortiguador y nutrición del cartílago. Su principal función es permitir el movimiento, y por tanto, nuestra autonomía funcional. Los sitios más frecuentes donde encontramos artrosis son la columna (cervical y lumbar), cadera, rodilla, manos, codo, tobillo”, señaló.
Sus principales síntomas para identificar, profundiza la doctora Cuadra, es cuando el cartílago de las articulaciones se lesiona y esto produce dolor, rigidez e incapacidad funcional.
Sin embargo, añade, “es importante diferenciarla de la artritis, ya que en esta es la inflamación la causante de la enfermedad y en la artrosis es el «desgaste». Son dos enfermedades que cursan con dolor, en ocasiones hinchazón y rigidez, pero en la artrosis el dolor es de tipo mecánico (empeora con los movimientos y mejora con el reposo), por lo que son patologías distintas y se abordan terapéuticamente de manera diferente”.
Terapias complementarias
Si bien en la actualidad no existe una única cura para la artrosis, el objetivo de los tratamientos que se implementan en Clínica CRL -expertos en medicina deportiva y laboral, con sucursales en cuatro comunas de la RM y una en Viña del Mar- son disminuir el dolor, retrasar la evolución de la enfermedad y mejorar la calidad de vida.
La doctora de Clínica CRL, Eva Peña, precisa que para las lesiones de tendones con roturas parciales o totales, tendinopatias en deportistas que desean regresar rápidamente a la práctica deportiva o personas con artrosis en diferentes articulaciones, anteriormente la operación era la opción si el fortalecimiento muscular con kinesiología no tenía éxito.
“Sin embargo, en la actualidad se han desarrollado procedimientos menos invasivos que se utilizan como paso previo a la cirugía, como las infiltraciones y la electrólisis, que son prácticas comunes en nuestra clínica. Estos tratamientos ayudan a reducir el dolor del paciente y a acelerar la recuperación, siempre complementados con ejercicios de kinesiología”, precisa.
En casos de artrosis leve o moderada en pacientes que aún no necesitan una prótesis, como en rodillas o caderas, se pueden emplear infiltraciones con ácido hialurónico o con plasma rico en plaquetas, combinado con ácido hialurónico.
“Estas infiltraciones -enfatiza la especialista- mejoran el entorno biológico de la articulación, reducen el roce y el dolor del paciente, facilitando así la realización de ejercicios de kinesiología y actividades cotidianas. Incluso en casos de artrosis avanzadas, cuando la cirugía no es una opción viable, estas infiltraciones pueden proporcionar alivio”.
La artrosis, una enfermedad degenerativa de las articulaciones, puede beneficiarse de una variedad de terapias complementarias que inciden en el alivio de los dolores musculares y mejora la calidad de vida de las personas.