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La Superintendencia del Medio Ambiente formuló cargos contra la sociedad inmobiliaria propietaria de la parcelación “Reserva Ecológica Oasis de La Campana” por generar afectación a un área protegida de altísimo valor ambiental y realizar obras de construcción sin Resolución de Calificación Ambiental. La empresa arriesga una multa de más de $7.434 millones.
Tras una denuncia por elusión al sistema de evaluación de impacto ambiental hecha por vecinos de la parcelación “Reserva Ecológica Oasis de La Campana“, ubicada en la comuna de Hijuelas, Región de Valparaíso, la Superintendencia del Medio Ambiente anunció el pasado 3 de febrero el levantamiento de “una infracción calificada como gravísima, principalmente porque la empresa modificó la propuesta original derivando en un proyecto inmobiliario de desarrollo urbano con obras de construcción que no cuenta con una Resolución de Calificación Ambiental”.
El organismo indicó que este es un proyecto inmobiliario de desarrollo urbano que supera el umbral de 80 viviendas y que algunos lotes se ubican sobre El Parque Nacional La Campana, lo que estaría generando un riesgo de afectación a esta área protegida de altísimo valor ambiental.
Dado lo anterior, la SMA informó que “la Sociedad Inmobiliaria Oasis de La Campana” arriesga una sanción de hasta 10.000 Unidades Tributarias Anuales (UTA), equivalente a más $7.434 millones”.
La empresa tendrá un plazo de 10 días hábiles para presentar un Programa de Cumplimiento y de 15 días hábiles para formular sus descargos tras la notificación de la sanción.
La denuncia por elusión al SEIA fue encabezada por la Junta de Vecinos del Oasis de La Campana. Su presidente, Fernando López, destaca que “como organización de propietarios y residentes de parcelas de este loteo valoramos enormemente el procedimiento sancionatorio anunciado por la SMA. Esto es resultado de un trabajo largo y acucioso de muchos vecinos y vecinas que han aportado su tiempo, experiencia y apoyo para defender este hermoso lugar y evitar que intereses económicos lo destruyan. Este es el logro de una comunidad unida y consciente de sus derechos, pero también de sus deberes”.
La parcelación Oasis de La Campana se vendió originalmente como un proyecto de 353 parcelas. Sin embargo, la resolución de la SMA constató que actualmente está subdividido en 2.121 lotes o parcelas.
López destaca que “esperamos que con este procedimiento los vecinos podamos finalmente hacer valer nuestra voz, en defensa del ecosistema, del Parque Nacional La Campana y de nosotros mismos, que ya estamos sufriendo las consecuencias de las irregularidades ambientales y la expansión insostenible que ha hecho la inmobiliaria, que continúa vendiendo parcelas. Por eso es importante que las responsabilidades se exijan al loteador”.
Además de este caso, en enero la SMA acogió a investigación una segunda denuncia por elusión al SEIA presentada por la JVOLC por la parcelación Barrio Privado Lafquén, aledaña al Oasis de La Campana y al Parque Nacional, y de propiedad del mismo grupo inmobiliario.
Propiedad de la inmobiliaria y lavado verde
La Sociedad Inmobiliaria Oasis de La Campana es propiedad de los hermanos Mauricio y Francisco Moreno Sagredo. En diciembre pasado, en su balance ambiental 2022, la Fundación Terram otorgó a Mauricio Moreno Sagredo, el premio Lavado Verde, aludiendo a él como “referente de los empresarios parceleros cuyos proyectos de “barrios ecológicos” fragmentan los ecosistemas bajo un manto publicitario de verde, creando núcleos extraurbanos por fuera de toda planificación territorial”.
Pese a estos antecedentes, Mauricio Moreno Sagredo es integrante del Consejo Consultivo del Medio Ambiente de la Región Metropolitana como representante “de las ONG sin fines de lucro que tiene por objeto la protección o estudio del medioambiente”. Su designación data de enero de 2021 y su continuidad se definirá en la sesión de marzo.
Pese a que su negocio es el de las parcelaciones rurales, con más de 12 loteos entre las regiones de Valparaíso y Coyhaique, Moreno se presentó al consejo consultivo como representante de la Fundación para la Protección de la Palma Chilena y Bosque Esclerófilo, creada por él y su familia en 1997. Sus últimas memorias anuales (https://bit.ly/Fpalma) reflejan la escasa actividad de esta fundación y la ausencia de acciones concretas en pro de la conservación o estudio de la palma chilena.
