Max Schnitzer, abuelo de Jacinta, enfatizó que la Cámara Alta “tiene la gran responsabilidad y el desafío de avanzar en este proyecto con el fin de tener conductores más seguros y proteger a las víctimas de accidentes viales”.
Tras la aprobación en la Cámara de Diputadas y Diputados respecto del proyecto de ley Jacinta, este miércoles la Comisión de Transportes del Senado inició su discusión en general donde se escuchó al ministro del ramo, Juan Carlos Muñoz, quien entregó detalles de la moción y la instancia estableció un cronograma para recibir a distintos actores para que expongan sobre el tema.
Entre los invitados, inicialmente los senadores determinaron escuchar durante marzo a la SIAT de Carabineros, a la Conaset, a la Asociación Chilena de Municipalidades, a Automóvil Club de Chile y a la Asociación de Aseguradoras, entre otros.
Posteriormente a estas sesiones, la Comisión de Transportes de la Cámara Alta podrá votar en general y particular, para luego despachar a la Sala de Sesiones.
Un homenaje convertido en ley
La Ley Jacinta lleva este nombre en memoria de una bebé de cinco meses que perdió la vida en 2022 tras ser atropellada por un conductor de 80 años con problemas de salud que afectaban sus capacidades motoras. El proyecto surge como un esfuerzo conjunto entre la familia de la víctima, el Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones, y el Parlamento para prevenir tragedias similares.
Max Schnitzer, abuelo de Jacinta, comentó: “El proyecto Ley Jacinta llega al Senado perfeccionado, dialogado y trabajado por más de dos años junto a la Conaset, a la Comisión de Obras Públicas y Transportes de la Cámara de Diputados, y al Ejecutivo”.
“Esta propuesta ciudadana viene con un nuevo nivel de seguridad vial y también, especialmente, con medidas de protección a las víctimas de accidentes viales en lo económico, laboral, emocional y penal, beneficiando a millones de chilenos, porque viene a humanizar las políticas públicas”.
Agregó que “el Senado tiene la gran responsabilidad y el desafío de avanzar en este proyecto con el fin de tener conductores más seguros y proteger a las víctimas de accidentes viales”.
En tanto, Cristián Reitze, presidente de la Asociación Nacional de Importadores de Motocicletas (ANIM), quien se reunió con Max Schnitzer donde analizaron los distintos puntos en común sobre la moción, destacó la misión admirable de la familia González Schnitzer en memoria de la pequeña Jacinta y reiteró el apoyo del gremio.
“Hemos hecho público nuestra opinión respecto de que el texto de la ley española, que regula las condiciones en que niños menores de 12 años pueden montar como acompañante en una motocicleta; es el texto que consideramos más adecuado, porque lo permite en determinadas circunstancias que nos parecen muy razonables”, precisó.
“Entre otras materias, coincidimos absolutamente en la necesidad de aumentar la cobertura del SOAP, como a su vez, en la necesidad de disminuir el costo del SOAP que se cobra a las motos, mediante una modificación -por ley-, del concepto de dicho Seguro”, puntualizó.
Principales modificaciones
La Ley Jacinta establece cambios significativos en el proceso de obtención y renovación de licencias de conducir, entre los que destacan:
Declaración jurada de salud: Los conductores deberán declarar bajo juramento que no padecen enfermedades restrictivas o inhabilitantes, reguladas por los Ministerios de Salud y Transporte.
Evaluaciones físicas y psíquicas: Las municipalidades serán responsables de certificar las capacidades físicas y psicológicas de los solicitantes.
Sanciones severas: La omisión de enfermedades relevantes podrá ser considerada una infracción grave, lo que podría derivar en la cancelación de la licencia.
Medidas adicionales
El proyecto incluye otras disposiciones destinadas a mejorar la seguridad en las vías:
Restricciones en motocicletas: Se prohíbe que menores de edad viajen entre el conductor y el manubrio.
Incremento de indemnizaciones: Se aumentarán las compensaciones por muerte o incapacidad a 600 UF, financiadas a través del Seguro Obligatorio de Accidentes Personales (SOAP).