Con éxito mujeres de Lampa culminaron el programa de alfabetización digital de la Universidad Finis Terrae, recibiendo -en una emotiva ceremonia- los diplomas que acreditan este importante logro, en el que destacó su empuje y ganas de superación.
“Por primera vez me senté frente a un computador, el cual ya lo conocía, pero nunca había estado frente a uno, porque yo solamente tengo mi teléfono y nada más, y para mí todo esto es emocionante”, dice la señora Mercedes Urrutia, una mujer de 63 años, jefa de hogar de la comuna de Lampa, tras recibir su diploma que acredita su participación en los talleres de digitalización realizados en la Facultad de Ingeniería de la Universidad Finis Terrae y que son un esfuerzo conjunto entre la Municipalidad de Lampa, la casa de estudios.
En el marco de este emotivo acto, realizado en Casa Central, el vicerrector de Formación Integral, José Mateos, destacó la colaboración interdisciplinaria y su significado para la sociedad. “Ha sido una buena experiencia de cómo trabajar en conjunto las distintas áreas de la universidad (…) ha sido significativa para todos”, dijo, resaltando -además- el crecimiento personal de los estudiantes al integrar su profesión con la vocación.
Mateos, también subrayó la importancia que da la universidad a la persona, ubicándola en el centro de la experiencia. “Creemos mucho en la centralidad de la persona y quizás uno de los distintivos de este proyecto ha sido poner a la persona al centro, es decir, no se trata de cumplir un trámite, cumplir con una asignatura, sino que cada uno de los estudiantes se sintió muy identificado en acompañar a cada una de las jefas de hogar”, recalcó.
Por su parte, el alcalde de Lampa, Jonathan Opazo, agradeció a la universidad por la oportunidad brindada a las mujeres jefas de hogar. “Están felices porque tienen por primera vez la experiencia de venir a la universidad y eso es realmente transformador”, comentó, expresando -además- su ganas de continuar el trabajo conjunto entre la Universidad Finis Terrae y el Municipio de Lampa para futuros proyectos.
La decana de la Facultad de Ingeniería, Angélica Urrutia, en tanto, resaltó la relevancia de la educación de servicio y el contacto de los estudiantes con la realidad. “Mostrarle a nuestros alumnos que la vida social es más de lo que ellos conocen es trascendental, sobre todo, llegar a lugares donde hay personas que nunca han conocido la tecnología”.
A su vez, instó a desafiar estereotipos y brindar oportunidades a las mujeres. “Lo más importante acá es darle un rol a la mujer, que no es estar solamente en la casa, sino que también es poder llegar a la universidad, yo creo que ese es el desafío más bonito que ha quedado aquí de manifiesto”, indicó.
Experiencias
Sonia Liberona, de 67 años y con 20 años viviendo en Lampa, expresó su agradecimiento por esta experiencia. “No me esperaba algo tan hermoso, lo sentí de corazón”, señaló, mientras que Sandra Corrales, otra de las jefas de hogar que participó del programa, destacó la superación del miedo a la tecnología y la motivación proporcionada por los alumnos: “Fue un curso maravilloso en el cual perdimos el miedo de enfrentarnos a un teléfono o a un notebook (…) me siento muy contenta, muy feliz”. Mercedes Urrutia, coincide con sus compañeras y agrega; “Para mí es emocionante, porque por primera vez conozco una universidad ni tampoco lo había soñado”.
Por su parte, la estudiante de Ingeniería Civil Industrial, Paola Sitja, hace una positiva evaluación de la experiencia, señalando: “Afrontamos la oportunidad de aplicar nuestro conocimiento, convirtiendo cada obstáculo en una lección preciada”, y junto con destacar la ejecución del proyecto, agregó: “No solo nos enseñó sobre planificación y coordinación, sino que nos brindó una perspectiva más amplia sobre el mundo que nos rodea”.
Estos talleres de alfabetización digital son resultado de un proyecto que se originó en agosto pasado, cuando estudiantes de la Facultad de Ingeniería -en el marco de la semana de la solidaridad- visitaron Lampa para realizar entrevistas y recopilar información con el objetivo de identificar las brechas digitales entre las mujeres jefas de hogar de esa comuna. Estos datos sirvieron como base para la creación y ejecución del proyecto ganador, enfocado en reducir dichas brechas y fomentar el uso eficiente de dispositivos móviles.