Cambio de horario y otoño: Las claves para reducir el consumo energético en los meses más fríos, es decir, otoño e invierno.
La llegada del otoño no solo trae un marcado descenso de las temperaturas.
También acarrea una reducción de las horas de luz, debido al cambio de horario.
Ante este escenario
Es fundamental conocer estrategias que permitan optimizar el consumo energético, para reducir el costo de la electricidad y, al mismo tiempo, contribuir al cuidado del medioambiente.
Las bajas temperaturas comienzan a sentirse en distintas regiones del país y es fundamental adoptar medidas que permitan calefaccionar los hogares de manera eficiente.
«Durante estas fechas, el consumo de energía en el hogar aumenta significativamente. Por ello, creemos que priorizar la eficiencia energética es fundamental para construir un futuro más sostenible. Implementar medidas simples en el hogar no solo ayuda a reducir el gasto en electricidad, sino que también contribuye al bienestar del planeta», señala Jason Iong, director transaccional de Schneider Electric.
De esta manera
El experto, entrega una serie de recomendaciones generales.
Para optimizar el consumo de electricidad, reducir la factura de luz y, al mismo tiempo, ser más amigables con el planeta.
Las claves para reducir el consumo energético
- Aprovechar la luz natural:
Mantener persianas y cortinas abiertas durante el día para permitir el ingreso de la luz solar y aprovechar su calor natural, reduciendo la necesidad de calefacción artificial
- Aislar el hogar adecuadamente:
Sellar ventanas, puertas y paredes para evitar filtraciones de aire frío, lo que contribuirá a mantener una temperatura interna confortable con menor consumo energético
- Regular la temperatura:
Programar un termostato para encender y apagar la calefacción de manera eficiente, evitando mantenerla encendida todo el día.
Los termostatos inteligentes permiten un control remoto preciso.
- Elegir electrodomésticos eficientes:
Optar por artefactos con una alta calificación energética permite un menor consumo y mayor eficiencia.
- Apagar luces y dispositivos electrónicos cuando no se usen:
Una medida sencilla y efectiva para reducir el gasto energético.
- Realizar mantenimiento regular del sistema de calefacción:
Mantener en buen estado los equipos de calefacción para asegurar su eficiencia y prolongar su vida útil.
- Incorporar energías renovables:
Considerar la instalación de paneles solares o bombas de calor para generar energía propia y reducir la dependencia de combustibles fósiles.
- Adoptar hábitos de consumo responsable:
Pequeños cambios, como reducir el tiempo en la ducha o apagar dispositivos cuando no se utilizan, pueden generar un impacto significativo en el ahorro de energía.