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Desde la clásica oferta–demanda, hasta el costo de los créditos hipotecarios y el aumento en las condiciones restrictivas para acceder a su otorgamiento inciden en que exista mayor interés de personas en arrendar.
Para nadie es un misterio el aumento que existe en las personas por arrendar. Esto ha llevado a un encarecimiento en el valor de los arriendos que, debido a las altas restricciones que está poniendo el mercado para acceder a créditos hipotecarios, haga que las personas vean en arrendar una opción más accesible para vivir junto a su núcleo familiar.
En este sentido la vicedecana de la Facultad de Administración y Negocios de la Universidad Autónoma de Chile, Jennifer Rivera, explica que “el precio de los arriendos viene dado por condiciones de oferta y demanda, en particular en el último tiempo se ha visto un incremento en la demanda por arriendos dadas las mayores restricciones para acceder a una vivienda propia, pues el costo de los créditos hipotecarios a aumentando notoriamente, cubriendo sólo el 80% del valor de la vivienda, a lo que se suman condiciones más estrictas para el otorgamiento de estos, por lo que en este caso los mayores precios son explicados por el mayor interés de las personas en arrendar”.
Referente a si es más costoso vivir en casa o departamento, la académica de la Universidad Autónoma afirma que “estos dependen de las características del inmueble, ubicación, metros cuadrados construidos, acceso a servicios cercanos (seguridad, servicios hospitalarios, colegios, cercanía a supermercados y centros comerciales, entre otros) además en el comparativo hay que considerar el efecto del pago de gastos comunes en el caso de condominios y edificios”.
En cuanto a las proyecciones del mercado, Jennifer Rivera indica que es difícil pensar en que la trayectoria de los cánones de arriendo varíe. Sin embargo, lo que sí podría ocurrir es que “estos presenten aumentos de menor cuantía, es decir, pueden seguir subiendo, pero en menores montos que las alzas observadas hasta ahora. Esto pensando además en las proyecciones que hay para la inflación este año 2023”.
Finalmente, consultada sobre si es más conveniente comprar una vivienda o arrendar, la profesional indica que “los altos costos y condiciones más restrictivas para acceder a una vivienda, en estos momentos hacen que muchas familias de clase media estén optando por arrendar, dado que constituye una opción más accesible. Sin embargo, y en una mirada de mediano plazo y considerando que las tasas de los créditos debieran ir poco a poco bajando, conforme tasa de política monetaria vaya también teniendo esta trayectoria, debiéramos esperar que aumenten los incentivos porque las familias retomen su interés por acceder a la casa propia”, manifestó la vicedecana de la Facultad de Administración y Negocios de la Universidad Autónoma.
