Se estima que a nivel mundial se necesitan 8 millones de personas trabajando en la industria de la ciberseguridad, sin embargo, actualmente hay solo cuatro millones de puestos cubiertos. Las organizaciones de nuestro país son atacadas en promedio 60 mil veces al año y Chile es uno de los países con más ciberamenazas en Latinoamérica.
A medida que la economía se digitaliza, lo mismo ocurre con la vulneración de datos. El mayor problema es que cada día la brecha entre oferta y demanda de profesionales especializados en el campo de la ciberseguridad va en aumento.
En este contexto, Miguel Pérez, CEO de NovaRed, multinacional dedicada a la ciberseguridad, señala que “el talento es escaso, se debe aprender rápido porque las tecnologías avanzan del mismo modo. El tema se ha vuelto un gran problema, tanto así, que actualmente en Chile existen al menos 6 mil vacantes en el rubro TI que no hay cómo llenarlas. De hecho, en 2021, un reporte indica que las estadísticas revelaron que en América Latina casi el 50% de las vacantes TI no fueron cubiertas dado a la falta de profesionales.
Y la desventaja continúa, porque según expertos en la materia los atacantes no tienen las limitaciones que tienen los ‘defensores’ en términos de presupuestos. Dado los beneficios económicos de un ciberataque los ciberdelincuentes -desde hace ya un tiempo- se dedican a desarrollar y comercializar herramientas de piratería para realizar todo tipo de ataques, bajo un modelo de servicio que luego es vendido a cualquier persona que quiera llevar a cabo este tipo de acción cibercriminal.
Chile en “el foco de la tormenta”
En nuestro país, por ejemplo, el 90% de las organizaciones no cuenta con la debida protección para enfrentar ciberamenazas.
De hecho, una empresa en Chile es atacada 1 vez cada 8 minutos, es decir, 60 mil veces al año en promedio. “La superficie de ataque se ha ampliado de forma impresionante, hoy los activos informáticos están desplegados a lo largo y a lo ancho de toda la organización. En Latinoamérica, Chile y Perú son los dos países más acatados, están en el ‘foco de la tormenta’ actualmente”, comenta Gery Coronel director de Check Point Software para Chile.
A ello, el experto de NovaRed agrega: “Los hackers saben dónde llevar a cabo sus delitos. Entienden que la plata no está en los países más ricos, porque ellos tienen mayores tecnologías de protección, tampoco está en los más pobres por razones lógicas. Entonces, ahí es donde aparecen algunos países latinoamericanos como Chile, por ello estamos siempre en más riesgos ante los ciberdelincuentes”.
Futuro en inversión en ciberseguridad
La inversión en tecnologías y directamente en lo que se refiere a ciberseguridad, ha ido en aumento los últimos años. Más aún, tras la transformación digital que se vio acelerada por la pandemia a causa del Covid 19. Sin embargo, los expertos recalcan su preocupación de que esta inversión no es suficiente.
El primer semestre de este año los ciberataques a nivel global crecieron en un 42%, según un informe entregado por CheckPoint, no obstante, “la inversión en ciberseguridad está muy lejos de ese crecimiento. Entonces, como no pueden crecer al mismo ritmo, el panorama para la ciberdefensa se vuelve cada día más difícil”, puntualiza Pérez.
Durante la jornada del evento de ciberseguridad realizado por NovaRed “NSW 2022”, en octubre pasado, Ignacio Briones, exministro de Hacienda, explicó que “para 2023 se ve en Latinoamérica una disminución muy significativa en su crecimiento económico. En Chile vamos a entrar en recesión y vamos a tener un crecimiento negativo. Pero la industria de la ciberseguridad es una industria más blindada, mucho más resiliente que el resto”.
El académico de la UIA y actual presidente de Centro de Estudios Horizontal señala que la pandemia no solo aceleró el cambio tecnológico, sino que produjo un salto de un equilibrio a otro. Las empresas tuvieron que adoptar nuevas tecnologías de forma acelerada y no de acuerdo a una planificación, por lo que todo lo relacionado a ciberseguridad -en muchos casos- quedó fuera, por lo que ahora se genera una “demanda oculta” por la necesidad de mitigar los riesgos que se generan frente a la digitalización acelerada.
El economista puntualizó que “la ciberseguridad es un mercado que tiene mucho espacio para crecer ya que se mueve básicamente con la intensidad del uso de las tecnologías de la información y el ecosistema de datos. Eso obviamente hace que sea un mercado más resiliente al ciclo económico”, concluyó.