Economista de la U. Autónoma entrega una serie de recomendaciones que te ayudarán a mejorar tus finanzas domésticas, ordenar tus gastos y sobrevivir los compromisos económicos que trae consigo la llegada de marzo.
El término de la época estival trae consigo también la cuenta regresiva para el “temido” mes de marzo, uno caracterizado por la infinidad de gastos en los cuales debemos incurrir tales como: créditos hipotecarios, arriendos, permiso de circulación, SOAP, cuotas de tarjetas de crédito o créditos de consumo, pago de servicios, y gastos frecuentes tales como alimentación, combustible o pasajes para otros medios de transporte.
Por esta razón, y para que puedas ordenar y obtener el mejor rendimiento de tus ingresos, te dejamos una serie de recomendaciones que comparte la economista de la Universidad Autónoma de Chile, Jennifer Rivera.
Consultada, la especialista indicó que “me parece recomendable considerar al menos tres acciones”:
– Realismo: Determinar los ingresos con los que efectivamente se cuenta, considerando tanto los que se originan como fruto del desempeño laboral como aquellos que no lo son, como es el caso de subsidios, bonos, devoluciones de impuestos, entre otros.
– Planificación: Identificar claramente los ítems de gastos, tanto fijos como variables, priorizando aquellos que son fundamentales para la subsistencia y el desarrollo de las actividades regulares de los integrantes del grupo familiar.
– Gasto responsable: Comparar el volumen de ingresos versus los gastos proyectados y determinar el saldo que arroja esta comparación. Si es negativo, se requiere revisar las partidas de gastos, para ajustar en la medida de lo posible el volumen de estos. Si este ajuste no es viable, entonces y sólo entonces, habría que buscar financiamiento (ahorros o deudas de corto plazo) del menor costo financiero posible, en cuyo caso lo más recomendable es el plástico que tiene convenios de 3 cuotas precio contado, por ejemplo, lo que permite aliviar con posterioridad el pago sin interés de por medio.
La economista Jennifer Rivera -que además es vicedecana de la Facultad de Administración y Negocios de la Universidad Autónoma de Chile- indicó además que “una cuestión básica para optimizar y ordenar el gasto es definir prioridades, ya que esto nos permite diferenciar entre lo necesario, lo operativo y lo prescindible”, concluyó.